La primera semana de Diciembre estuvo bastante intensa y abrumadora, en el buen sentido. Fue la semana de mi cumpleaños, con lo cual me salí un poquito de mi carril. Entre lunes y miércoles solo había entrenado un día.
Cuando el jueves me reuní con mi entrenador, y como no nos veríamos hasta el próximo martes, le pedí ayuda con una rutina corta e intensa para el viernes bien tempranito. Todavía tenía miles de cosas que hacer y clientes que atender.
Esto fue lo que mi entrenador me dejó de tarea cuando le pregunte: ¿Qué puedo hacer mañana?
10 minutos de intervalo de alta intensidad (HIIT) en la bicicleta
Un plank
3 sets de 15 crunches (reverse crunches fue lo que hice en las bandas de suspensión, es un excelente ejercicio)
Y la última asignación fue la siguiente. Mi edificio tiene nueve pisos, los cuales me mandó a subir y bajar, por la escalera, dos veces. ¡Uff!
Fue una rutina súper divertida que, a las 5 de la mañana me puso en el mejor de los ánimos. Además corta y vigorosa. ¿Y saben qué? Solo necesité mi propio cuerpo y mi voluntad para llevarla a cabo.
Una excelente herramienta
La creatividad siempre debe estar presente cuando pensamos en rutinas eficientes y rápidas, por eso no hay excusas que valgan cuando dices que no tienes tiempo para ejercitarte.
Solo dile a tu entrenador que te enseñe a entrenar de manera eficiente, sin mucha complicación, con movimientos donde exista la fuerza provista por tu propio cuerpo. A eso agrégale una voluntad implacable.
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Empezamos el 9 de enero del 2017. Aquí puedes ver todos los detalles y testimonios de temporadas pasadas.
