Leo a Seth Godin casi todos los días, y este artículo fue inspirado por uno de sus más recientes publicaciones.
Pensando en metas u objetivos, en este caso los de fitness o acondicionamiento físico, si realmente queremos ver un cambio y tener un estilo de vida más saludable, habremos de sacrificar cosas o tendremos que dejar de hacer cosas para lograrlo.
¿A qué estarías dispuesto a renunciar para sentirte mejor mañana? ¿La próxima semana? O ¿En diez años?
Nuestras metas a largo plazo, no son la suma de aquellas a corto plazo. Hay que decidir y establecer el plazo en el que quieres trabajar para conseguir un mejor acondicionamiento físico, el cual generalmente es “largo”, yo diría que es un proceso que se lleva a cabo por el resto de nuestras vidas.
¿Cómo te quieres ver/sentir en diez años—y durante el transcurso de estos- y a qué estarías dispuesto a renunciar para lograrlo?
Feliz Domingo de Pascua para todos.