Dentro de las dimensiones del bienestar, en la de fitness–dimensión física–la falta de tiempo es una de las excusas más recitadas por las personas sedentarias.
Ayer ví un post en facebook de una de mis amigas que ha perdido 45 libras. Esto ha ocurrido a lo largo de tres años. Y ha sido un cambio estable.
Ella ha sido estable con sus ejercicios y con el cambio en su manera de alimentarse. Sus resultados han sido y serán sostenibles en el tiempo.
Lo que me llamó la atención de su post fue un comentario que decía:
Mis entrenamientos no son negociables.
Este es el secreto para resultados garantizados. Tu hora de ejercitarte tiene que ser sagrada. Y no negociable. Es algo establecido–ojalá al principio del día–y todo se empieza a construir a partir de ahí.
Entrenamientos que no se negocian
Porque para lograr un gran cambio hay que ser estable, consistente y estar comprometido. Estar comprometido es no negociar tu hora de ejercitarte.
